Cronica de un equipo que no se rinde

Uno de los equipos que pelea por la promociona es Gimnasia y Esgrima de La Plata. Y el “amor por la camiseta” trasforma a su campaña en una de las mas interesantes


A tres décadas de su último descenso Gimnasia y Esgrima de La Plata pelea nuevamente por permanecer en primera. Y tanto el equipo como la hinchada saben que deben ponerle el pecho a esta situación.

Es por este motivo que el plantel no baja los brazos, a pesar que los resultados no vienen dándose a su favor. El quiebre se produjo en la quinta fecha, cuando "El lobo", empató 1-1 frente a Argentinos Juniors. Desde ese momento empezó una racha, donde no puedo obtener una victoria, aunque en muchas ocasiones el equipo haya jugado bien. Esto se vio reflejado, sobre todo, en el polémico Clásico de La Plata, donde se adicionaron 7 minutos, que cambiaron el resultado del encuentro. Gimnasia encuentro el partido en el complemento, jugándolo con inteligencia, y analizando el juego de ambos equipos; el triunfo tripero hubiera sido lo más justo, debido a que arriesgó más. Esto no solo era un triunfo importante para el histórico de encuentros entre estor ambos, teniendo en cuenta que de los 144 partidos que se disputaron Gimnasia ganó 44 y Estudiantes 50, este último coincide con el número de encuentros empatados. También hubiera significado un envión anímico para “El lobo”.

El amor por la camiseta que tiene sus jugadores, es otra d las cosas resalta a este equipo porque es justo en esto mentó donde varios de “los históricos”, volvieron para afrontar este momento. Entre ellos se encuentran: Gastón “El gato” Sessa, Mariano Messera, Sosa y Romero.

Otro dato para destacar, es que "El Lobo" fue el único equipo que logró vencer a los tres punteros del torneo, frente a Lanùs obtuvo un triunfo por 3 - 2, contra Huracán ganó 2 - 0 y finalmente en la décimo cuarta fecha frente a Vélez venció 3 - 1. Desde esa fecha Gimnasia logró dos victorias al hilo, lo cual lo esperanza para seguir jugando la promoción y no ir al descenso directo.

La hinchada, la cual nunca deja de alentar, más allá que el equipo gane o pierda, entiende que en estos casos, hay algo clave, y es que los jugadores mantengan el buen estado anímico y de eso los triperos algo saben.